sábado, 8 de noviembre de 2025

Fernando Guerrero y su andar inquieto tras las huellas de un Arpa... Por Alexander Lugo

 



El Arpa, imponente maga que traspasa culturas y memorias. Atada a ti, como un hechizo... 

¡Cuántas cosas! Una espada con runas, que brilló en una batalla,

un violín persa, la máscara mortuoria de Beethoven…

cuadros, atlas, partituras…

 Unas ocultas copas con un gustado vino,

objetos sagrados de una tribu de nuestros antepasados africanos o asiáticos,

umbrales, el dintel de una ventana, una mano que me toca,

una sonrisa que está oculta…,

¿Durarán más allá de nuestro olvido?

 

“Monumento de una tarde sin duda inolvidable. No sabrán nunca que nos hemos ido” 

(la frase es de Borges)


 Es el arpa un instrumento tan antiguo como la historia misma de la evolución musical de la humanidad. Sus primeros relatos aparecen ya en textos y pasajes bíblicos y era un instrumento muy estimado y ejecutado, ya sea por reyes, personajes históricos, guías espirituales y por el pueblo llano.

A Venezuela llegó temprano el siglo XVII, traído por los primeros misioneros y se habla de su importante acogida en la población de indígenas nuestros y de los primeros africanos que llegaron a estas tierras en condición de esclavos. Fascinante es el relato del esclavo “Juan de Mata”, que fue puesto en venta por allá por tierras del actual estado Falcón, y que su valor se multiplicó por ser un importante ejecutante del arpa.

Pocos países en el mundo tienen un arraigo y desarrollo musical alrededor del arpa, como lo tiene Venezuela. Y máxime, que contamos con dos tipos muy distinguidos de ese fabuloso instrumento. Quizás el mayor de los cordófonos de tipo pulsadas. El Arpa Tuyera (o central) y el Arpa llanera. La morfología de cada una de ellas, diseño organológico, dimensiones, encordadura, técnica y repertorio musical, es distinta y claramente identificables al oído más distraído, o para aquellos “más sordos que una campana de trapo”, como diría Simón Díaz.

Todos estos fascinantes aspectos, históricos, despertaron en nuestro autor de hoy una curiosidad, yo diría que insaciable, tal como debe ser en quien aspire a ocuparse seriamente de estudiar a lo largo de su vida, algún aspecto del saber científico, humanístico, artístico o esotérico, un poco de todo eso lo posee y mantiene intacto Don Fernando Guerrero.

Los aspectos más relevantes de su trajinar intenso en la música se pueden verificar fácilmente leyendo cualquiera reseña biográfica, en los innumerables programas de conciertos donde ha participado desde temprana edad, en la gigante labor de gerente cultural, nada más y nada menos que en los albores y desarrollo del Programa de educación musical más importante del país y de los más destacados del mundo, como es nuestro Sistema Nacional de Orquesta y Coros…  Y en su labor investigativa, de musicólogo y escritor, que es la que nos ocupa la tarde-noche de este primer lunes de noviembre.

Fernando, podría decir, de una vez, que ha dedicado su vida a la investigación. Y el arpa, ocupa ese lugar central en su curiosidad infinita. Sin temor a equivocarme puedo decir que no pasa un día en que no esté en su pensamiento y en sus indagaciones perennes, y que no ha dejado de aprender cada vez más sobre los sonidos de seda de ese fascinante cordófono que lo definen. Ver el rostro, en alguna foto de Fernando, al lado de algunas de sus fabulosas arpas, mimetizado entre su enjambre de cuerdas, es ya una sola y clara visión de lo que representa su vida ante este instrumento.

Lo ha estudiado desde que era un adolescente de apenas 13 años, lo ha intensificado y perfeccionado en los Conservatorios, lo ha presentado en infinidad de conciertos y recitales, que no se detienen, lo ha enseñado y junto a notables colegas, ha creado escuela en el estudio del arpa, lo ha investigado a lo largo de su vida, de manera sistemática y metódica. Ha escrito y transcrito, infinidad de obras tanto del repertorio popular venezolano, latinoamericano y universal, para este instrumento. Ha dictado charlas y conferencias, nacional e internacionalmente, ha sido jurado de concursos de arpista en diversas partes del mundo. Y al menos desde hace 27 años, ha publicado, artículos, reseñas, folletos, capítulos y su publicación más relevante, este importante libro, para la literatura musical venezolana y latinoamericana, como es el Arpa en Venezuela, que presentamos hoy en su “cuarta edición, corregida y modificada” de los talleres de la Fundación para la Cultura y las Artes, FUNDARTE, de 2025. Y que presentamos orgullosamente en esta Feria del Libro de Caracas y en estos hermosos espacios de la Galería de Arte Nacional de Venezuela.


Alexander Lugo R.





Fernando Guerrero y su andar inquieto tras las huellas de un Arpa... Por Alexander Lugo

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